Día 5, Verona

 El día 5. Verona es una ciudad italiana de la región de Véneto, con más de 250 mil habitantes y un centro económico y cultural. Está situada en el río Adigio, cerca del lago de Garda, y tiene un aeropuerto internacional y una red de transporte terrestre y acuático.

Verona ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por la importancia y el valor de sus edificios históricos. Entre ellos se encuentran el Museo de Castelvecchio, la Iglesia de Santa Anastasia, la Basílica de San Zenón, la Torre de Lamberti, el Palazzo Barbieri y el Jardín Oficinal de Marzana.

Verona fue colonia y municipio romano, y conserva monumentos de la antigüedad, como la Arena y el teatro romano. Fue sede de dos catedrales en el siglo IX, una dedicada a San Alejandro, patrón de la ciudad, y otra a San Vicente. La primera fue destruida por los venecianos en el siglo XVI, y la segunda cambió su dedicación a San Alejandro. La catedral actual se restauró en el siglo XVII y tiene una fachada neoclásica del siglo XIX.

Casa de Julieta

Verona es famosa por ser el escenario de la obra de Shakespeare Romeo y Julieta, que narra la historia de amor trágico entre dos jóvenes veroneses. En la ciudad se puede visitar la casa de Julieta, con su famoso balcón. Es un continuo entrar y salir de personas y, como no, hacerse la foto con la estatua de bronce de Julieta.

Arena de Verona

El día 5 en Verona nos va a hacer correr, por poco tiempo y por lluvia, menos mal que nos llovió llegando a la Arena de Verona. La Arena de Verona es un anfiteatro romano ubicado en la ciudad italiana de Verona, conocida por las producciones de ópera que se realizan en él (Festival de Verona). Se trata de una de las estructuras de su estilo mejor conservadas.

Paseo por Verona

Vaya día 5 en Verona!! Paseo por Verona relámpago por algunas de sus calles, se nos hacía tarde y nos quedaba llegar a Venecia con hora de coger el hotel. En lugar de explicaros cada imagen, la describo en el subtítulo de cada fotografía de la galería.

Accesibilidad

En cuanto a la accesibilidad, sigo diciendo que en Italia es otro mundo, se preocupan por las personas con movilidad reducida y para colmo no pagan las entradas a los monumentos. La única pega que pondré en otras ciudades es el tipo de calzadas con adoquines  que destrozan los músculos al pasear por ellas. No es el caso de Verona donde se puede pasear casi por todo el casco histórico sin problemas.